Catástrofes naturales. Una secuencia electrónica de evolución, formada por grandes y densos grupos de notas, constituye la esencia de este movimiento. La tragedia queda reflejada por el tañido de unas campanas distorsionadas, casi imperceptibles al principio. A partir de un momento concreto suenan siguiendo una cadencia regular de doce campanadas, como mecanismo para dar estructura a este movimiento totalmente descriptivo. Tras las campanadas, la secuencia electrónica acaba con un suspiro final. La música representa cómo el planeta se transforma en un monstruo que, a través de las “Catástrofes naturales”, en un intento de supervivencia, se rebela contra la acción del ser humano.
www.carloscelma.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario
COMENTAR